La Facultad de Medicina de la Pittsburgh ha realizado un estudio que demuestra que solo en una cuarta parte de las infecciones se recetan nuevos fármacos efectivos contra las bacterias. Este tipo de antibióticos deben usarse en las infecciones por enterobacteriaceae resistentes a los carbapenems (CRE). Esta es de la familia de las bacterias más intratables que existen y muy resistentes a los medicamentos.
Tras observar la baja aceptación de estos antibióticos, los investigadores decidieron realizar un estudio sobre la administración clínica y farmacéutica en los hospitales de EE. UU. El objetivo principal de la investigación era encontrar el modo de revertir esta tendencia. Esto se debe a que las empresas farmacéuticas podrían verse obligadas a dejar de producir estos antibióticos que resultan tan efectivos.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades en EE. UU. han clasificado a la CRE como una amenaza urgente de patógenos. La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Sociedad Americana de Enfermedades Infecciosas han calificado a la CRE de máxima prioridad para elaborar antibióticos.
Antibióticos usados contra las infecciones
Desde el año 2015, se han utilizado 5 antibióticos contra la CRE y han obtenidos la aprobación de la Administración de Medicamentos y Alimentos de EE. UU. (FDA). Estos fármacos son ceftazidima-avibactam, meropenem-vaborbactam, plazomicina, eravaciclina e imipenem-relebactam. Los 3 primeros son antibióticos muy eficaces para combatir el CRE, pero los 2 últimos son demasiado buenos para obtener resultados concluyentes.
Por otra parte, en la investigación también examinaron el conocimiento de los nuevos antibióticos y su disposición a utilizarlos. Los fármacos fueron clasificados como principal opción en la lucha contra las infecciones sanguíneas de primera línea por el 90% de los farmacéuticos. Por otro lado, estos medicamentos pueden ser la solución a la neumonía según el 87% de profesionales y las infecciones intraabdominales para el 83%. Por último, para un 56% serían útiles en las infecciones de tracto urinario.
Uso de antibióticos
Sin embargo, los investigadores observaron que los nuevos fármacos efectivos contra las bacterias se utilizaron solo en el 23% de los casos. En este sentido, los científicos sugieren que una de las razones principales del bajo uso de los nuevos antibióticos es el coste. Los nuevos fármacos suponen un coste entre 13 000 y 15 000 dolares, mientras que los antiguos costaban entre 305 y 784.