Los premios a Proyectos Zero han clausurado el LIV Congreso Anual de la SEMICYUC (Sociedad Española de Medicina Intensiva y Unidades Coronarias). Tal y como destaca la SEMICYUC, el congreso celebrado hasta este miércoles en Palma ha finalizado con la entrega de acreditaciones a las UCI españolas. Estos galardones se han entregado a las UCI (unidades de cuidados intensivos) que han alcanzado los estándares de los Proyectos Zero.
Dichos proyectos, explica la sociedad científica, están liderados por sociedades de intensivos (SEMICYUC y SEEIUC) y cuentan con el patrocinio del Ministerio de Sanidad. A través de estos proyectos se ha logrado reducir la tasa de infecciones asociadas a dispositivos en los pacientes críticos.
Además de los premios a Proyectos Zero, durante esta edición del congreso se han abordado aspectos clave en la especialidad. La simulación clínica ha sido la protagonista de la última jornada. Según señala la SEMICYUC, esta herramienta es vital en la mejora de los protocolos en los servicios de Medicina Intensiva. En este sentido, la SEMICYUC propone implantar la formación basada en competencias. Asimismo, pretende demostrar la viabilidad de la simulación para acelerar la adquisición de habilidades.
El potencial de esta herramienta está en que permite crear ambientes simulados con un alto grado de realismo, destaca la SEMICYUC. De esta forma, los profesionales sanitarios pueden entrenarse y reflexionar sobre sus decisiones. Una mejor formación de los profesionales redundará en una mayor seguridad para los pacientes, añade.
Simulación: pieza clave en la formación
Según explica la SEMICYUC, existen distintos tipos de simulaciones. Algunos permiten trabajar aspectos técnicos de la especialidad como la canalización de las vías centrales, la broncoscopia o la técnica ECMO. Por otro lado, permiten poner en práctica protocolos de tratamiento de síndromes comunes y la toma de decisiones en situaciones de crisis.
Tal y como describe la SEMICYUC, la simulación es una pieza clave en la formación médica actual. Esto se debe, en parte, a los cambios sociales que se han producido en los últimos años. Según indica la SEMICYUC, la formación tradicional se enfocaba a la cultura de los cuidados de salud orientados a un aprendizaje. Sin embargo, en la actualidad el paciente exige calidad. Además, ya no es un sujeto pasivo que forme parte del proceso de formación del personal sanitario.
En la simulación, los intensivistas emplean maniquíes enteros o partes del cuerpo, actores o sistemas que recrean diferentes situaciones. Los maniquíes o robots automatizados de alta fidelidad se pueden programar como pacientes en diferentes situaciones clínicas permitiendo comprobar las habilidades en diferentes maniobras.