La herramienta se basa en 8 comportamientos frente al dolor y es especialmente útil para los pacientes que experimentan un dolor severo en determinados procedimientos que se practican en una UCI, apuntan los investigadores. Este sistema, denominado BPAT (Behavior Pain Assessment Tool), ha sido testado en pacientes críticos adultos.
Tal y como apunta EurekAlert, las condiciones clínicas impiden que muchos pacientes ingresados en la UCI puedan manifestar su dolor (alteración de los niveles de consciencia, ventilación mecánica, sedación…). Ninguna de estas situaciones permite una percepción fiable y una evaluación del dolor que experimentan estos enfermos, de ahí la utilidad de esta herramienta, explica Céline Gélinas, una de las autoras del estudio.
El BPAT se basa en la interpretación de determinados comportamientos como la expresión facial, las respuestas verbales y las musculares. La herramienta se ha traducido a 12 idiomas y ha sido evaluada durante más de 4.800 procedimientos en 3.850 pacientes hospitalizados en 192 unidades de cuidados intensivos de 28 países.
Los resultados mostraron que 2 tercios de los pacientes eran capaces de comunicar su dolor. La mayoría de los comportamientos frente al dolor que registra esta herramienta fueron más frecuentes durante la realización del procedimiento que antes de la intervención. Las muecas faciales fueron el comportamiento más observado.
Según concluye el estudio, la BPAT tuvo un buen desempeño en la identificación de pacientes con graves niveles de intensidad del dolor y la angustia que podrían beneficiarse del tratamiento con medicamentos opioides (narcóticos). Esta herramienta es fiable y válida para su uso en pacientes críticos ya que asegura una adecuada evaluación del dolor, afirman los investigadores.