Tras una ardua investigación de 10 años, se ha descubierto un efecto mariposa en los telómeros. Un cambio en ellos controla la capacidad de las células para generar un organismo completo, según informa la agencia EFE. A esta conclusión ha llegado un grupo de investigadores del Grupo de Telómeros y Telomerasa, capitaneados por María Blasco en el CNIO.
Este efecto mariposa en los telómeros, estructuras que protegen los genes en los cromosomas, supone un paso importante en medicina regenerativa. Las células pluripotentes, señalan desde la agencia, producen a todas las células un gran poder para el cultivo de órganos para trasplantes.
“Estos hallazgos nos explican el hecho de que TRF1 sea esencial para la reprogramación de las células especializadas y para mantener la pluripotencia“. Rosa Marión, primera autora del estudio.
Según el CNIO, este hallazgo implica desvelar unas marcas bioquímicas llamadas señales epigenéticas. Estas señales controlan la expresión de los genes como si se tratase de interruptores. De este modo, se controla el proceso por el cual una célula se convierte en pluripotente.
Células pluripotentes
En los telómeros hay un gen único, el TRF1, que posee una acción global en el genoma y causa este efecto mariposa en los telómeros. Este fenómeno es esencial para iniciar y mantener la pluripotencia de las células.
“Lo que han descubierto los investigadores es que las TERRA (moléculas largas de ARN) actúan sobre genes clave para la pluripotencia a través de las proteínas Polycomb“. El ADN de los telómeros es el que coloca la producción de las TERRA.
Estas proteínas controlan los programas que determinan qué pasará con las células en una primera fase embrionaria depositando una marca bioquímica en los genes. Para explicar este efecto mariposa en los telómeros, intentaron llevar a cabo una búsqueda no dirigida que explicara los cambios del genoma cuando se impedía la expresión TRF1.
El interruptor que regula TERRA es el gen TRF1. El equipo no llegaba a entender por qué ese gen presente solo en los telómeros era tan importante en el proceso de pluripotencia. “TRF1 tenía un efecto brutal, pero muy organizado“, afirmó Blasco. Su equipo asiente que esta expresión génica ejerce un efecto mariposa en los telómeros y altera el paisaje epigenético.