Según explica el hospital, el programa que desarrolla Fisiobot queda registrado en una tarjeta personal e intransferible para cada usuario. Gracias a esta tecnología, el equipo de Fisioterapia puede realizar cientos de pases a una velocidad, presión, temperatura y distancia del cuerpo del paciente constante que sería imposible con la mano humana.
Está previsto que el Fisiobot sea testado durante las próximas semanas en el Servicio de Rehabilitación y Fisioterapia del hospital de Vigo. El equipo, desarrollado por el Departamento de Ingeniería y Rehabilitación de la Clínica Ordóñez de Oviedo, estará disponible, de forma gratuita, para todos aquellos pacientes que, de acuerdo con su fisioterapeuta, quieran probarlo.
La selección del Hospital Vithas Nuestra Señora de Fátima como centro verificador para contrastar la eficacia de este robot se debe, por un lado, a la apuesta constante del centro vigués por la innovación sanitaria y la mejora de la atención al paciente; así como por el hecho de que el Servicio de Rehabilitación y Fisioterapia del Hospital Vithas Nuestra Señora de Fátima es un centro de referencia con una amplia experiencia, tanto de pacientes que han sufrido un accidente de tráfico, accidentes laborales, deportivos, o domésticos; como quirúrgicos, apuntan desde el centro.
¿Cómo funciona este robot?
En primer lugar, Fisiobot realiza un análisis volumétrico del paciente (un escáner) para regular los parámetros del tratamiento que se conservan en la tarjeta personal del usuario, que se transmiten con tecnología inalámbrica RFID. El tratamiento inicial que ofrecerá el robot consiste en una terapia con aire comprimido caliente y entre 4 y 10 bares de presión diseñada para tratar problemas de espalda (aunque puede utilizarse también en otras partes del cuerpo). La presión es controlada por un fisioterapeuta que lleva el seguimiento del tratamiento y la temperatura del aire por el propio paciente.