Esa es la principal conclusión de un estudio presentado por la investigadora Melissa Butt en el encuentro anual de la Society for Investigative Dermatology (SID). Según informa MDedge, el equipo estadounidense utilizó la base de datos MarketScan para identificar a 1.733 pacientes que habían reclamado atención médica por HS entre 2012 y 2013.
Asimismo, revisaron las reclamaciones médicas previas al diagnóstico. Entre las cerca de 240.000 reclamaciones de atención realizadas entre 2008 y 2011, casi 11.400 incluían códigos para otras enfermedades de la piel y los tejidos subcutáneos. Solo un 31% habían sido atendidas por dermatólogos; un hecho que, de acuerdo con los investigadores, pudo llevar a un mal diagnóstico.
Por eso, destacan la necesidad de guías que ayuden a identificar esta enfermedad, cuyo tratamiento centra otro de los estudios presentados en el encuentro de la SID. En ese caso, un equipo de la Johns Hopkins University estudió el impacto de los antibióticos en el tratamiento de la HS a partir de lesiones de 239 pacientes.
Los investigadores aislaron proteobacterias en cerca de la mitad de los pacientes tratados con trimetoprima/sulfametoxazol y el 88% de las colonias fueron resistentes a dicho tratamiento; sin embargo, solo en el 13% de los cultivos de pacientes no tratados creció proteus. Estos resultados, entre otros, siembran dudas sobre el uso de antibióticos para tratar la HS.