El doctor Alfonso Vidal no es, como el mismo reconoce “un acupuntor al uso”. En el último Desayuno Informativo de MedLab Media Group, el anestesiólogo y coordinador de la Unidad del Dolor de Quirónsalud Sur ha profundizado en las contradicciones de la acupuntura, una herramienta “con la que corres el riesgo de estar vendiendo humo pero que, bien utilizada, puede ser útil para tratar el dolor”.

El doctor Alfonso Vidal no es, como el mismo reconoce, “un acupuntor al uso”. En el último Desayuno Informativo de MedLab Media Group, el anestesiólogo y coordinador de la Unidad del Dolor de Quirónsalud Sur ha profundizado en las contradicciones de la acupuntura, una herramienta “con la que corres el riesgo de estar vendiendo humo pero que, bien utilizada, puede ser útil para tratar el dolor”.

Para Vidal la acupuntura comenzó siendo una curiosidad y acabó convirtiéndose en listas de espera de pacientes. “Empecé a indagar porque, en la unidad de dolor donde trabajaba, había pacientes en los que no lograba resultados y que, de repente, volvían mejor diciéndome que habían ido a ver a un especialista chino”. Ahora, con un Máster en Acupuntura por la Universidad Complutense de Madrid, Vidal se declara “converso, pero también incrédulo”.

“En los libros clásicos, la acupuntura sirve para todo; lo mismo cura malaria que cataratas o disfunción eréctil”, explica Vidal, “si la acupuntura fuese realmente eso solo haríamos acupuntura”. En su esfuerzo por encontrar un equilibro y, sobre todo, un beneficio para el paciente,el anestesiólogo también cuestiona a los defensores intolerantes de lo científico.

Evidencia científica

“Hasta el más erudito se pone la camisa que toca para cada evento, se peina de cierta manera… todos tenemos una serie de elementos mágicos que no damos por malos”, argumenta el invitado. “No puedes cerrar todas las iglesias de todas las creencias por el hecho de que no haya certeza científica de que exista Dios, por la misma razón que no puedes decir que tienes un contrato que firmado te lleva al cielo”.

En esta misma línea, “no puedes afirmar que vas a curar con acupuntura”; sin embargo, existe un nivel de evidencia limitado pero amplio sobre su utilidad. Según los datos ofrecidos por Vidal durante el Desayuno Informativo, el Ministerio de Sanidad publicó en 2011 un documento acreditando la acupuntura para el tratamiento de ciertas patologías y, recientemente, el British Medical Journal ha ratificado la utilidad de la técnica.

 “El Dr. Kovacs publicó sus trabajos de neurorreflejoterapia en una revista de impacto razonable en la Medicina del Dolor, como es Spine. Hizo un ensayo muy bien estructurado y construido, pero si fuese así, estaríamos poniendo grapas ”, reflexiona el anestesiólogo. Admite la gran dificultad de hacer ensayos clínicos doble ciego sobre técnicas de este tipo.

Respecto a la literatura científica sobre acupuntura, “cuando se introduce la aguja en un sitio correcto y uno incorrecto, los resultados no son claros, pero sí parece evidente que pinchar produce más efecto que no hacerlo”, resume el especialista.  En definitiva, “la acupuntura no sirve para todo, no sirve siempre, pero es una herramienta más”.

Efecto placebo

Entre quienes pueden beneficiarse de esta técnica alternativa Vidal señala a pacientes muy polimedicados, con intolerancia a ciertos fármacos con el interés y la voluntad de hacerlo. “No creo nada, pero estoy dispuesto a creerme lo que vea que al paciente le ayuda de alguna manera”, admite el anestesiólogo. Considera que también el sistema sanitario debería ser más permeable “a la acupuntura, y a todo”.

Lejos de descartar el efecto placebo de la acupuntura, Vidal propone emplearlo a favor de la práctica clínica. “El efecto de sugestión está en todas partes, el Dr. Vidal con corbata cura más que el Dr. Vidal sin corbata”, bromea, “la capacidad de comunicación, la interacción y la atención personalizada también se pueden emplear como herramientas complementarias; lamentablemente falta empatía, pero no solo entre los médicos”.