Los expertos indican que este periodo quedó marcado por alta mortalidad prematura, morbilidad y discapacidad entre los jóvenes. La alta mortalidad fue causada por "el colapso del sistema social y la falta de atención a la salud", indica el documento. Además, la OMS señala que las razones del alcoholismo en Rusia se debe también al "comportamiento poco saludable" y a la "privatización del mercado del alcohol en los años 90".
El documento señala que esta privatización llevó a un aumento de la accesibilidad y el consumo de alcohol y, por lo tanto, de la mortalidad.
La OMS califica el alcoholismo como una enfermedad social, generada por una profunda crisis, y no como una característica determinada histórica. La organización indica que es necesario “atacar al alcoholismo en Rusia y reformular la política de salud", con el fin de controlar el mercado del alcohol y reducir su consumo.
La lucha contra el alcoholismo en Rusia la empezó el gobierno en 2004. Un año más tarde, el presidente Vladímir Putin reconoció que el problema tenía mucha relevancia y está vinculado con la disminución de la esperanza de vida. En aquel momento se adoptaron una serie de cambios legislativos en el ámbito de la regulación de la producción y venta de productos alcohólicos.