Las infecciones bucales tienen una relación directa con la anemia. De forma general, esta patología provoca que el cuerpo no pueda producir suficientes glóbulos rojos sanos. Esto afecta al suministro de oxígenos a los tejidos, entre ellos, a la boca. El Colegio de Dentistas de Santa Cruz de Tenerife recomienda informar siempre al odontólogo si se padece este déficit.
El hierro es fundamental para reducir el riesgo de infecciones bucales, por lo tanto, su déficit puede suponer un aumento de estas dolencias. La falta de hierro se asocia a una bajada de defensas de la boca, de ahí la mayor incidencia de enfermedades en las encías. De hecho, la reiteración de estas enfermedades puede alertar al dentista de que el paciente quizás tenga una anemia no diagnosticada.
Indicios de anemia en la lengua
En función del tipo de anemia sufrida, la lengua podrá presentar un aspecto más pálido y rojo de lo normal. Además, puede inflamarse e irritarse hasta llega a provocar ardor y dolor. Esto es conocido como glositis y su diagnóstico es un potente indicio de déficit de hierro. También son comunes las boqueras, fisuras o grietas en las comisuras de los labios.
Recomendaciones para las infecciones bucales
A pesar de que depende del caso y del tipo de anemia presentada, el dentista recomendará al paciente una serie de medidas de prevención. Estas se dirigirán principalmente, a evitar las frecuentes infecciones bucales. La higiene diaria bucodental es fundamental, sin olvidar el cepillado de lengua con un raspador específico y el uso de cepillos interdentales. Por otra parte, es muy importante cumplir el calendario de visitas pautado por el dentista y detectar a tiempo posibles focos infecciosos.