El ingreso sistemático del paciente anciano en la UCI no produce diferencias significativas en la mortalidad a los 6 meses. Un estudio publicado por la European Society of Intensive Care Medicine (ESICM) ha analizado los resultados en la mortalidad de este tipo de programas de ingreso sistemático en UCI en 24 hospitales franceses.
La investigación se llevó a cabo en 3.037 pacientes ancianos evaluados por los servicios de urgencias. Todos ellos tenían 75 años o más, mantenían un estado funcional y nutricional adecuado y no tenían cáncer, explica el estudio. Para llevar a cabo la investigación los autores se sirvieron de un diseño de asignación al azar por grupos.
Los centros seleccionados fueron asignados al azar para promover la admisión sistemática de pacientes ancianos en la UCI o para decantarse por un programa de control de la atención estándar. El resultado primario, explica el estudio, fue la mortalidad a los 6 meses. Tal y como reconocen los autores el diseño de asignación proporcionó una metodología factible para investigar la intervención.
Los resultados mostraron que el riesgo bruto de muerte a los 6 meses fue más alto en el grupo de ingreso sistemático en la UCI, aunque no se encontraron diferencias significativas entre los 2 grupos de pacientes ancianos tras ajustar las características basales. La tasa de ingreso en la UCI fue del 61% entre los pacientes del programa de admisión sistemática, frente al 34% en el grupo de control.
Los autores comprobaron que la mortalidad hospitalaria fue significativamente mayor en el grupo de pacientes ancianos que participaron en el programa de ingreso sistemático frente a los del grupo de control. Según señala la investigación, no hubo diferencias significativas en las medidas de calidad de vida a los 6 meses o el cambio en el estado funcional de los pacientes en los 2 grupos.