De acuerdo con la especialista, Gestafit nació para demostrar los beneficios en embarazadas de un ejercicio físico exigente frente al mito de que no deben realizarse esfuerzos durante la gestación. En la primera fase, se siguió a un grupo de mujeres que hicieron vida normal, mientras otro realizó un programa de entrenamiento que incluía levantamiento de peso y sentadillas.
“Hemos comprobado bastantes beneficios de la actividad física durante el embarazo y muy pocas contraindicaciones”, ha señalado Ocón, según la cual las mujeres que entrenan tienen partos más rápidos que las que se mueven menos, que tienen más riesgos de diabetes, hipertensión, etc. También mejora la calidad de la leche, lo cual influye positivamente en el desarrollo neurológico del niño.
“El yoga para embarazadas no es suficiente, la mujer tiene que hacer ejercicio de verdad”, ha añadido Lidia Romero, responsable de conducir el entrenamiento del proyecto Gestafit. Este comienza en la semana 16 de embarazo con ejercicios diseñados por el Instituto Mixto Universitario Deporte y Salud (Imuds) de Granada. En verano, el ejercicio se traslada a la piscina.