El uso de esta tecnología requiere un equipo médico especializado. Este método puede incorporarse a la práctica clínica, según señala TASS, para procesar los datos de laboratorio. Los investigadores rusos recuerdan que la presencia de síndrome metabólico o diabetes complica el tratamiento del cáncer de mama y reduce la eficacia de la quimioterapia.
A partir de un estudio de las proteínas citinasa, esta herramienta es capaz de predecir la probabilidad de desarrollar metástasis o la recurrencia del tumor en los pacientes. A partir de esta información, el sistema asigna una quimioterapia personalizada ajustada a las necesidades de cada paciente.
Los responsables del desarrollo de esta tecnología han reconocido que en Estados Unidos y los Países Bajos cuentan con herramientas de diagnóstico similares, pero que no tienen en cuenta las comorbilidades, por lo que su eficacia se ve reducida. Tal y como señalan, la herramienta de estos 2 países consiste en un análisis cuyo coste alcanza los 2.000 dólares, y el procedimiento tiene una duración de 14 días. Los científicos de Tomsk tienen previsto patentar su herramienta e introducirla en la práctica de los principales proveedores de atención sanitaria.