Los investigadores señalan que las campañas de vacunación destinadas al personal sanitario, podrían ser más eficientes si se reforzaran con vídeos divulgativo, implicaran a los servicios y estuvieran orientadas por categorías y áreas. Aun así, el estudio subraya que estas campañas consiguen captar a nuevos trabajadores y ayudan a mantener a los ya activos.
El estudio se ha llevado a cabo en dos fases. La primera fase se ha basado en el estudio descriptivo observacional de trabajadores del hospital para conocer los motivos de aceptación o rechazo de la vacuna. La segunda fase se basó en el desarrollo de una novedosa campaña informativa para desmitificar las falsas creencias que motivaron la no vacunación.
Después, se llevó a cabo un estudio descriptivo transversal y se compararon los resultados de la segunda fase con los de la temporada anterior, lo que mostró que el 37% de los trabajadores vacunados afirman que la campaña ha influido en su decisión; existía significación estadística entre la influencia de la campaña informativa y el no tener antecedentes previos de vacunación.
Según afirma el estudio, no existe asociación entre la influencia de la campaña y la categoría profesional, el servicio adscrito o el género sexual. La cobertura vacunal se mantuvo sin cambios en un 36%. El estudio pretendía comprobar también la respuesta del personal a las recomendaciones sobre vacunación de la Organización Mundial de la Salud (OMS).