SAAP-148, un fragmento corto de proteína sintética, podría ser un potente agente frente a las bacterias resistentes a antibióticos, según ha descubierto un grupo de investigadores liderado por Anna de Breij, que pertenece a la American Association For The Advancement Of Science. Los resultados que demuestran estos hallazgos se publican en la revista Science Translational Medicine.
Anna de Breij y sus colaboradores crearon diversas versiones modificadas de un péptido antimicrobiano humano llamado LL-37, el cual funciona como una de las principales defensas inmunitarias innatas para combatir las bacterias. Estas modificaciones se lograron mediante la creación de agujeros en sus membranas más externas.
Tras analizar cientos de péptidos, los investigadores se centraron en SAAP-148. Así, comprobaron que tenía una gran capacidad para eliminar varias bacterias resistentes a numerosos fármacos pertenecientes a la clasificación ESKAPE, un grupo de patógenos peligrosos denominado de esta forma por la Infectious Diseases Society of America (IDSA) debido a su gran resistencia a los antibióticos y a su capacidad para provocar grandes daños en los seres humanos.
SAAP-148 eliminó las bacterias que producían biofilms en los cultivos, incluso las poblaciones de células persistentes (persister cells, en inglés) que permanecen en un estado latente en contacto con los fármacos y que pueden resurgir y provocar una posterior infección al administrar un tratamiento con antibióticos.
Además, los investigadores utilizaron una sustancia que contenía un péptido específico a través del cual podían tratar de manera eficaz infecciones por Staphylococcus aureus resistente a la meticilina y heridas infectadas por Acinetobacter baumannii en ratones y en muestras de piel humana. Los autores aseguran que se realizará un ensayo clínico en 2018 con el objetivo de investigar el tratamiento con mayor profundidad.