La revista Nautilus publicó el pasado mes de agosto un reportaje dedicado al cerebro del escalador, ejemplo de cómo la vida puede afectar a la estructura de dicho órgano. Se trata solo de uno de los estudios que se han llevado a cabo en ese sentido en el campo de la Neurociencia, tal y como apunta la agencia rusa TASS.
En esa misma línea, se encuentra el caso de Phineas Gage, el obrero de ferrocarriles que sobrevivió a un accidente que acabó con gran parte de sus lóbulos frontales. El incidente modificó drásticamente su personalidad y dio lugar al inicio de la investigación de la citada parte del cerebro.
Otros estudios se han centrado en áreas diferentes. Así, por ejemplo, un trabajo realizado entre taxistas londinenses demostró que el volumen de la parte posterior del hipocampo aumentaba en proporción a las horas que pasaban al volante. Algo parecido ocurría con los músicos que tocaban instrumentos de cuerda; científicos alemanes demostraron que cuanto más tocaban, mayor era el volumen de su corteza cerebral.
Activando el placer
Igualmente, un ensayo llevado a cabo en 2011 entre 154 adolescentes aficionados a los juegos de ordenador demostró que aquellos que fueron más activos experimentaron un incremento significativo del volumen de los centros del placer y secretaron una serie de sustancias relacionadas con el mismo.
Frente a esos trabajos, otros estudios han mostrado resultados contrarios. Científicos suizos observaron cómo jugar al ajedrez puede reducir el volumen de la materia gris en el área de unión de los lóbulos temporal y occipital del cerebro, entre otras regiones. Del mismo modo, está comprobado que Neymar muestra menos actividad cerebral que otros jugadores.
Existen asimismo investigaciones que se centran en cuestiones psiquiátricas o en la captación de sonidos. De acuerdo con el neurocientífico Sebastian Seung, profesor del Massachusetts Institute of Technology, nuestra actividad nerviosa es como agua que fluye siguiendo su cauce. Siguiendo esa lógica, muchos investigadores apuestan por realizar estudios a largo plazo para comprender la verdadera naturaleza del cerebro.