Pese a que un alto porcentaje de estas intervenciones resultan exitosas (76-97,5%), en ocasiones el paciente requiere de una segunda operación (2,5-24%). Tal y como explica la otorrinolaringóloga María Colomé, del Centro Médico Teknon, es probable que la cirugía endoscópica nasosinusal proporcione una mejora durante un tiempo, pero que más adelante se reproduzcan las enfermedades que motivaron la operación.
En el estudio publicado en Acta Otorrinolaringológica Española, los autores han descrito las características clínicas, anatómicas, radiológicas e histológicas de pacientes sometidos a una cirugía de revisión en el Hospital Clínico Universidad de Chile durante un período de 3 años.
Los investigadores seleccionaron 299 procedimientos. De estos, 27 (9%) fueron objeto de revisión. El diagnóstico más frecuente fue rinosinusitis crónica poliposa y el tiempo medio desde la cirugía previa fue de 6,1 años. El tiempo de seguimiento desde esa cirugía fue de 11,9 meses. Los resultados mostraron que un 81,5% de los pacientes presentaba antrostomía estenótica durante la revisión, y un 59,3% etmoidectomía anterior incompleta y proceso unciforme persistente.
Las celdillas etmoidales anteriores fueron persistentes en el 70,4% de los pacientes. En un 96,3% de los casos se realizó antrostomía o una ampliación de ésta, y en un 66,7% se realizó o completó la etmoidectomía anterior. Los investigadores destacan que los pacientes tuvieron periodos largos en los que no hubo seguimiento entre intervenciones quirúrgicas, de ahí que consideren necesario continuar la investigación para desarrollar pautas que reduzcan el número de cirugías de revisión.