Según ha informado el centro en una nota, el equipo ha supuesto una inversión de 242.205 euros y se puede utilizar de forma complementaria o independiente a otras técnicas mínimamente invasivas como la litotricia extracorpórea.
Además, es multifunción y también se utilizará en un futuro para intervenciones de próstata, de acuerdo con el jefe del servicio de urología, Mateo Pérez, quien explica que el 85% de los cálculos renales se tratan con el litotrictor; no obstante, existen casos que presentan dificultades en su eliminación por este procedimiento.
Es en esas situaciones en las que se recomienda de forma complementaria la litotricia por contacto basada en la tecnología del láser Holmium. Este tipo de láser, además, es la primera indicación en los cálculos situados en el uréter pelviano y en la vejiga, precisa el doctor.
La realización de este tratamiento es, en general, mínimamente invasiva, ya que se accede al cálculo mediante una punción en la piel a nivel lumbar o a través de la uretra hasta la vejiga o el uréter, en función de donde se localice el cálculo.
“La energía contenida en el haz de luz del láser permite fragmentar el cálculo de forma rápida, eficiente y segura”, asegura el especialista.
El nuevo láser supone un gran avance en el tratamiento de la litiasis urinaria y ofrece la posibilidad de aplicar una fuente de energía potente, segura y controlable en la piedra, lo que permite una buena fragmentación que respeta las estructuras de la vía urinaria.
Según los especialistas, los cálculos renales afectan en algún momento de su vida al 12% de la población. Se da sobre todo entre los 40 y los 60 años y suele presentar recidivas. Se estima que esta patología representa hasta el 10% de las urgencias hospitalarias.