La crioterapia como alternativa a la cirugía de próstata permite acabar con las células tumorales sin necesidad de extirpar la glándula prostática, es decir, si tener que recurrir a la cirugía radical, método más utilizado a día de hoy para esta patología. Esta técnica supone para el Gregorio Marañón una personalización del tratamiento de cáncer de próstata.
La incorporación de la resonancia magnética multiparamétrica en el diagnóstico de los tumores de próstata facilita conocer en qué punto se encuentra el cáncer. Además, permite hacer las valoraciones pertinentes que lleven al especialista a decidirse por la cirugía focal o la cirugía radical.
La crioterapia ofrece grandes ventajas para el paciente; la recuperación es más rápida y los efectos secundarios se reducen. Como el paciente conserva la glándula prostática, con este tratamiento se reduce el riesgo de incontinencia urinaria, disfunción eréctil e impotencia, efectos muy comunes tras las tradicionales cirugías.
El Hospital Gregorio Marañón lleva 10 años usando esta técnica. El procedimiento consiste en meter unas agujas conducidas por ecografía para inyectar un gas que congela y elimina el tejido canceroso. Este hospital ha sido uno de los primeros en usar la crioterapia y realizada más de 20 intervenciones al año.
Esta técnica solo puede realizarse en los casos en los que el tipo de tumor y la localización lo permitan, por lo que se sigue ofreciendo la laparoscopia y la cirugía abierta a aquellos pacientes que lo necesiten. Cada año se diagnostica una media de 120 casos de cáncer de próstata, y el 90% son tumores localizados.